sábado, 31 de diciembre de 2011

ÚLTIMAS IMÁGENES DEL NAUFRAGIO




Miguel Ángel Maya León (1978-2011) dixit:

…Me vino grande el disfraz de cazatalentos…
…Dicho y hecho, necesito del recuento final para ver si gané o perdí a los puntos, por penalties, por defecto, si salí guapo en la foto, si fui un honroso subcampeón, si tengo algo que decir en la foto finish...




…No siempre me salen las cuentas del rosario destartalado en que se convirtió este 2011 que entierro, sepulto, escondo, maldigo y venero, gordo y decadente, con dos canas más a mi izquierda, con dos cicatrices más en el abdomen, como Elvis sentado en su trono/wc de oro, anfetamínico y sudoroso y perdido y fuera del mundo, como un astronauta con alzhéimer perdido en el espacio y viendo esta incandescente y gigantesca bola azul que gira, o como esos capítulos en los que aparecía el orondo Hitchcock cavando algo parecido a su propia tumba…




…Se me escapa 2011 de las manos, como cuando aprendí a pescar: pescar sintiendo que la soledad cala los huesos, como una noche, perdido en el océano, en la cubierta de un velero, bajo un cielo negro saturado de estrellas, en un punto impreciso entre Portobelo (Panamá) y Cartagena de Indias (Colombia), cuando di lo mejor de mí en medio de una tempestad: al tratar de sujetarme con las dos manos ni siquiera tuve miedo cuando las olas sepultaban por completo el velero, cuando ni siquiera pude respetar ese mandamiento sagrado de Malcolm Lowry: con una mano me sujeto, con la otra escribo…




…Sobredosis de porno, quizás demasiada morfina, pocos desencuentros pero cruciales, inexistentes bailes, baúles perdidos, indigestión coronaria, infarto de miocardio, de tucardio, de nuestrocardio, azúcar, amargura, gas azul de mecheros, cigarrillos, sicarios, buscavidas, parabrisas, vientos huracanados, calles de click de playmobil, coches de Barbie, muñecas hinchables, prosa discutible, inseguridad a raudales…




…Termino el año con frío y voz de gol de Iniesta: la voz que tengo el día después de que Iniesta marque el gol de mi equipo en el último minuto. Termino el año tomando conciencia de lo que no puede seguir así, de que así no, de que bienvenido sea lo malo por conocer, el chasquido de los dedos, los conejos en las chisteras, las ganas de morirse de risa, tomando conciencia de que ahí, en el espejo, guiña el ojo un puto mediocre friendo espárragos, un mierda, un tuerto en el país de los ciegos que prepara su abdicación en el país de los talones de Aquiles…




…Me voy cerrando las puertas de un portazo y con un quesealoquediosquiera que quita el sentío y cuyo eco retumba y retoza chabacano y delincuente, ilusionado, defraudado y defraudante a partes iguales, equivocado y equivocante, equino, equidistante, esdrújulo, sin brújula, inecuánime, acuánime, descuánime, estulto, estúpido, espídico, pírrico, paupérrimo y pésimo…




…Así me voy de aquí y así pongo el cuentakilómetros a cero. Todo empieza y todo acaba, como en las buenas películas en blanco y negro, como en las malas películas en technicolor. Salvado por la campana, malmetiendo todos los hechos relevantes por ver si al final merece la pena, las calles de París, las librerías de París, los goles de Messi, la voz de Goyeneche, Cohen y Piaff y Brel salvándome del naufragio, el sexo a trompicones, las ganas de más, el cielo de la boca tocado con las manos, los trompetistas invisibles, las razones sordas de todo, de cualquier cosa, las gracias, de nada, los intrincados vericuetos de cada cosa que se hizo un mundo, ay esa particular cosmogonía a la que tengo por costumbre recurrir, los pedazos de vida que no tuve cojones de tragarme, como en la canción de Paul Anka en la voz de Sinatra…




…Se van por un sumidero revertido, como del otro hemisferio del mundo, un accidente de tráfico, una espalda un poco más dolorida, un poco peor, dos masajistas en cada puerto de las 17 horas, rubia una (la de la rodilla en el costado), morena otra, que supieron llegarme al alma por el atajo de mis vértebras. Se va para siempre con el cambio de numerito del año el fracaso de tanto fraude: defraudé a mansalva, rompí la baraja, me convertí en un canalla (y no estoy diciendo que me convertí en hincha de Rosario Central), lo dilapidé casi todo, pero también renací, cambié la piel, y, creo, regresé un poco más acicaladito del infierno, como Chet Baker, desdentado y testarudo, pero con una voz que le habría puesto los pelos de punta al mismísimo diablo…




…Con mi escritura de segunda división, esta prosa pobre mendaz, mendiga y farsante al borde del colapso, esta poesía mísera de andar por casa, de pantuflas de cuadros de abuelo, le grito a estos últimos 365 días eso de “You’re fired!” de las películas de Chaplin, me convierto en zorra y dejo pasar estas uvas demasiado altas. Me retiro a mis apostentos hasta nuevo aviso: touché por demasiadas esgrimas, por demasiados talentos, despojado de demasiadas camisas de once varas…




…En el 2012 buscaré trabajo como pianista de cine mudo, me reciclaré, viviré en tu recuerdo como un triste aguacero, seguiré viendo el mundo con extrañeza y seguiré siendo un cursi y pudoroso pornógrafo: convertiré el tango de Enrique Santos Discépolo donde decía que “el mundo fue y será una porquería, ya lo sé” en mi bandera, asistiré a los juegos de manos y los malabares de los yernos golfos de los reyes, me convertiré en sombra chinesca y juraré que nunca más volveré a pasar hambre, todos mis besos futuros tendrán una banda sonora compuesta por Nino Rota, seguiré jugando a Capitán Accab, aprenderé a navegar, volveré a los escenarios, regresaré a la literatura, nos ocuparemos del mar y tendremos dividida la tarea…




…Mi contrabajo y yo seremos testigos de ajustes de cuentas entre mafiosos en garajes y nos marcharemos al sur disfrazados de mujer y tocaremos en orquestas femeninas y nos marcharemos en trenes nocturnos que simbolizarán la vida, la huida, la fuga, la libertad, y conoceremos a rubias inseguras y borrachas que se enamorarán de farsantes capitanes de barco. Mi piano y yo volveremos a ser lo que éramos: titiriteros, aprendices de brujo con el número de la cabra, el aplauso difícil, la gorra pasada con timidez, el pasemos a otro tema, ejem, esto, qué buena estás, adiós me voy, bum, bum, que déjate de líos…




…Me sentaré en el muelle de la bahía y silbaré finales de canciones mitológicas, volveré a Coney Island y a Buenos Aires y a Nápoles y a París, conoceré la Polinesia pertrechado del último modelo de taparrabos, me beberé todo el mar y todas las eclipses, de luna, de sol o de planetas, me convertiré en el tipo sexy que nunca fui, terminaré por declararle la guerra a las redes sociales, juro no volver a equivocarme de personas, juro no volver a confundir los personajes de ficción que se asoman a la webcam con personas de carne y hueso, juro no volver a creer más que en mi insignificancia, en mis bromas infinitas, en mis relecturas, en el cine revisitado, en los diálogos de cine en blanco y negro que quise haber vivido…




…No me dejaré salvar más que por las historias que merezcan la pena, sean del formato que sea, jueguen a lo que jueguen, digan lo que digan, lo digan como lo digan: no me dejaré salvar más que por el cine, el vino, los libros, el ron, mi gente… Sólo me dejaré salvar por entes que tengan una o dos sílabas como mucho, desconfiaré de las palabras largas, de los discursos grandilocuentes, de la solemnidad de los papanatas, del sentimiento exaltado y rojizo de las telenovelas, del cartón-piedra, del simulacro…
…Dejaré de creer definitivamente en Dios, salvo cuando escuche el piano de Monsieur Monk o la voz de Chet Baker…




…Me encerraré a escribir como el huraño que siempre quise ser, dejaré de confundir el neón con los cometas, me convertiré en el barón rampante de Calvino, en el Ulises Lima de mi calle, en el Marco Polo de mi comarca…




…Me marcharé en mi Fiat Janis a la conquista del sitio de mi recreo, nadaré y me beberé todas las copas del mundo, me convertiré en un faquir alcoholizado, en una peonza encendida, te pediré que me dances hasta el fin del amor haciendo el payaso desde una cuerda floja, espero mover el rabo como los perros felices, no forzar ni una sola caricia, no perpetrar ni un solo simulacro, no cometer ningún crimen que no sea imperfecto, bajarme en la primera estación de las coartadas, dejar de enturbiar la pupila de mis ojos cada vez que todo se hunde y mi corazón jazzístico se resiente…




…Citaré, mandaré, templaré, banderillearé con la cabeza alta, estaré atento al quite del perdón, terminaré por mandar el mundo al carajo, por convertirme en buscador de tesoros (si es que lo de pianista de cine mudo me dejara ratos libres), por embarcarme en empresas imposibles, por desacatar a la autoridad, por resistirme a los desalojos forzados…




…Esta noche moriré, ya veré si será cicuta, ruleta rusa o sobredosis de música y químicos. El mundo seguirá andando y cada día tendrá esos dos o tres segundos de oasis, esa felicidad emocionante con la que uno es capaz de marcarse un baile, aunque sea cutre, mientras dice aquello de: “valía la pena estar vivo”…




…A bordo del naufragio, todavía, que venga ya este 2012, crupier, y que me pille con el tapete limpito y verde y despejado de botellas medio vacías, y que las horas nos quiten lo bailao, pues al fin y al cabo, todas hieren…




...Lo demás, que descanse en paz, que let it be, que let it bleed, que sea, que amén, que sangre, que madure, que sí, que vale, que se convierta en un ejército de bravos napoleones sin batalla...
...Felices, como siempre, los normales: los que no tuvieron una madre loca, un padre borracho o un hijo delincuente...
...Y feliz año (a quien quiera que haya ahí)...




Miguel Ángel Maya
Sevilla, 31 diciembre, 2011

P.D. Las fotos son de Saul Leiter, y están tomadas de aquí.

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miércoles, 28 de diciembre de 2011



Vigilas desde este cuarto
donde la sombra temible es la tuya

No hay silencio aquí
sino frases que evitas oír.

Signos en los muros
narran la bella lejanía.

(Haz que no muera
sin volver a verte)

Alejandra Pizarnik




...Y poco más: conduzco desde Madrid con los labios cortados. Conducir por una carretera solitaria es como hacer largos en una piscina solitaria: la cabeza está en otra parte, sólo con el cuerpo basta para apuntalar lo que hace falta, lo que se necesita para llegar a destino sin más pretensiones. Desde el retrovisor veo (otra vez) las ochenta y ocho teclas blancas y negras que llevan diez años dancing me to the end of love, que viajan en la parte de atrás, y se relamen y tiemblan de futuro, como si no conocieran mis dedos, todavía, como si todo esto fuera un encuentro inesperado entre un pintoresco autoestopista y un acompañante de películas mudas, que es, en definitiva, lo que soy...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 28 diciembre, 2011
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viernes, 23 de diciembre de 2011




Ce qui m'intéresse n'est pas toujours ce qui m'importe
Paul Valéry




...Un hueco en el corazón se parece un poco al hueco de una bala...
...El mar en invierno debería ser el más acertado de los atajos, el más certero de los disparos, el más rocambolesco de los desencuentros domesticados: esa fierita paranoica que apenas muerde, que apenas lame, apenas cierra puertas, abre historias, entrevela un difunto, duermevela un moribundo, encela estas cuatro paredes que tienen la forma de un deshilachado y viejo viaje...
...Y voy dejando miguitas, pequeñas dosis de migue, apenas unas gotas, nada o casi nada, diluidas en la ciudad en invierno...
...Aprendiz de Pulgarcito estrenando botas de siete leguas con pan en los bolsillos: miguitas, nada, como si no me importara esto que lloro...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 23 diciembre, 2011
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martes, 20 de diciembre de 2011

PASOS EN FALSO




...Decido desmantelar el subsuelo con la delicadeza de la lluvia más fina...

...Ahora me lame, me toca, me gasta una memorable lluvia ácida que fue capaz de convertir en sonrojo todos los puntos cardinales. Doy pasos en falso, siento vergüenza ajena, de entre los seres humanos ni siquiera me salvo a mí, me escandalizo como esas plañideras fingidas que lloran la muerte de Kim Il-Jung. Veía venir el cortocircuito, la falta de nutrientes de este subsuelo. Hubo un tiempo en que fui el mejor de los peritos agrónomos en esta Siberia quemada con la que se recibía al ejército enemigo y se le daba una lección de juego y tiempos: usaba sinónimos y antónimos a mi antojo, derrochaba ilógicas meteduras de pata, pasos en falso a mansalva, vino tinto peleón pero caído en combate en el peor rin...
...Vendrán tiempos peores, y yo seguiré aquí: la más elegante de las avestruces con la cabeza bajo tierra, y el sombrero a salvo en el pecho, como quien sufre de amores, como quien da un pésame...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 20 diciembre, 2011
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jueves, 15 de diciembre de 2011

PORNO SOFT





...El típico romántico al que le faltan verbos, con sus diamantes carbonizados en el abdomen, como un vulgar terrorista cualquiera perdido o batiéndose a duelo en un enorme descampado con malahierba…

…El típico pornógrafo pudoroso y suave que cierra los ojos para disparar, o baja las persianas para no espiar cómo las vecinas se desnudan, cómo los balcones titilan, ladran, gritan, las luces tenues, los pianos, el charleston, lo prohibido, las gomas de mascar, los sicarios, los colmillos afilados, un dedo o dos dedos, elige, tengo muchos, dice en su lengua bizarra, lengua polisémica y de doble filo, dice, y ríen, quedamos en tres dedos con su niágara: cuando deja de enumerar siniestros y niebla, cuando deja de contar horas del día en las que ni siquiera tiene el valor de resucitar o de levar un poquito el ancla, eso dice, y callan, y otorgan, y se miran y buscan palabras, las buscan y tratan de ponerlas en pie, como el árbitro Collina cuando levantó uno a uno a los jugadores del Bayern después de ese gol del Manchester en el último minuto: mis palabras son jugadores del Bayern en el último minuto de la final de la Champions de 1999…





…No poder más con esa muñeca hinchable a tamaño natural llamada espacio/tiempo, no poder más con estos cincuenta y pico mil besos que siguen ahí, con sus paracaídas, preparados en el cielo de la boca para cuando llegue la próxima guerra preventiva…
...Porno soft y puntos suspensivos: no se me ocurre equipaje mejor para viajar a ninguna parte...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 15 diciembre, 2011

P.D.
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domingo, 11 de diciembre de 2011




Spero che un giorno
smetterai di fare confusione
tra il dolore e il piacere
la paura ed il bisogno di ferire.
Sono certa che un giorno
chiameremo tutto questo
col nome giusto
e ritrovata serenità

Carmen Consoli, Col nome giusto





...Ánimo, trilero, te digo, te llamo amor, desperezas la desmedida realidad de diciembre con tal de no verme, estúpido embustero, te acicalo los bigotes de Garble, te desnudo para desoxidar topografías, para trepar desde mi topera, me masturbo para dejar de verte, cierro las cortinas como quien presiente un accidente nuclear, como a quien no le quedan más balas. Justo hoy, domingo con niebla, sin tabaco y sin balas; justo hoy, jugueteando con un revólver sabiendo que será inofensivo. Este lavado de gato del alma, este no vaya a ser que, se está ya quedando sin cuerda; esta caja de música sin bailarina no da ya para más, ya no puede más...
...A lo sumo invento el secador de lágrimas. Te lo digo respetando la sintaxis de la cobardía: la cobardía tiene su sintaxis, sus reglas del juego, son una putada, son una escuálida escala de valores, que no es la mía, o sí. Me sumerjo en esos inventos que precedieron al cinematógrafo: panoramas y dioramas, el eidophusikon, los daguerrotipos, las linternas mágicas, el zoótropo, la triunial. Y me siento Méliès, y recuerdo cuando viajaba a la luna, cuando me esperabas allí, sin nombre, sin tiempo, ni falta que hacía...
...Ni falta que hacía...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 11 diciembre, 2012
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martes, 6 de diciembre de 2011




- ¿Sabes para qué debería utilizarse solo el retrovisor?
- ¿Para qué?
- Para mirarte todo el rato.

Paul Viejo, Los ensimismados


...La última imagen de mi fisioterapeuta rubia es su reflejo de espaldas, sus pantalones y blusa blancos, en el espejo del pasillo entrando en una cabina y girándose sin verme. Fin. Sus diez dedos (fríos) han mejorado mi espalda, su rodilla a veces rozándome en el costado (subía la pierna en el taburete para darme el masaje) ha mejorado mi alma, suponiendo que, para entendernos, hagamos esa pobre y estúpida división platónica entre cuerpo y alma. Platón es como una muleta que nos hace comprender algunas cosas a base de mentirnos o de jugar a que éramos: ¿vale que la realidad era algo magmático e incomprensible e inexplicable y que la ordenábamos? ¿Vale que yo era el inventor del alma y hacíamos una separación literaria entre ella y el cuerpo? ¿Vale que estábamos en una caverna viendo ilusiones y yo os abría los ojos? Mamarracho. La envidia, por ejemplo, reside en los poros. El alma, por ejemplo, reside en el movimiento. Soul. Ya sabes. Música. La música suele tener poner las cosas más claras que la metafísica, por eso Platón la odiaba: no comprendo el abismo, no sé bailar, ¡que le corten la cabeza a los sonidos incomprensibles! Ahora soy yo el que envidia a las demás pieles receptoras de sus diez dedos y su rodilla en los costados. Ahora soy yo el que conduce, trasteando en los botones de la radio con el semáforo en rojo, alejándome de todo. Ahora soy yo el que escribe, el que espera un broche de playmobil, el que pide que le manden un libro por correo. Soy yo el que no mueve ningún tipo de mundo, y sin embargo piensa que, si bien, Vincent, este mundo no se inventó para alguien tan bello como tú, los espejos retrovisores sí se inventaron para rendirse embelesado a ese gesto tuyo tan, a eso que haces con la boca, a esa música que...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 6 diciembre, 2011
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domingo, 4 de diciembre de 2011

SLAPSTICK




...Mi sístole y diástole es un slapstick...
...Amanece despacio por la ventana del tren, todo es rag-time, danzante onomatopeya sorda, cómic, tentativa, tiritera, taranta, todo es cine mudo, todo es un relinchar de violín en disco de pizarra...




...Sístole, diástole y slapstick, bang...
...Y esta caída en la marmita de un libro de Julio Verne, este fumar en el centro de la Tierra, este encender cerillas con el magma, este bocado de cenizas encendidas, tapando el sol con la yema de los dedos, esta busterkeatización de todo lo que late, esta Vía Láctea de estrellas y cometas apelotonados en una salida de emergencia, con luces encendidas y ya sin música en la discoteca de moda...




...Sin más este slapstick moderado, este promedio goleador que apunta hacia lo bajo, esta medianía de disparos de fogueo, desganados cohetes explotando, este diciembre de leve marejada, de madeja enredada, de grandilocuente taladro que se queda en nada, este majadero delincuente, esta madera con termintas o pólvora mojada del reflejo al otro lado del espejo: la cana en la perilla, la cerveza, el agua clara, la saliva espesa, el agujero en la sien, y el etcétera slapstick de un boom boom que gime como cuando, y la sintaxis, ay, la sintaxis, gemir, como cuando...



...Tengo guardados gags a mansalva en la manga, balas de goma, condones marchitos, sesiones de fisioterapia, todos los dedos del mundo en mi espalda, doctoras morbosas, ojazos azules de gas de mechero, literatura, mentiras, un acueducto de alcohol, una conspiración de nazis. Tengo una fama malcriada y no tengo más que echarme a dormir, calentarme con los laureles, soñar con ese slapstick que te comnueva y que cierre la puerta...
...Las sístoles y diástoles de hoy en día, que vienen sin libros de instrucciones, con unos slapsticks de cara de póker, y lo pillan a uno cautivo y desarmado como si fuera cualquier mamarracho de ejército enemigo compuesto de fantoches...



Miguel Ángel Maya
Sevilla, 4 diciembre, 2012
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viernes, 25 de noviembre de 2011

DON'T STAND SO CLOSE TO ME




Don't stand, don't stand so
Don't stand so close to me

Don't stand, don't stand so
Don't stand so close to me

The Police




...Don't do that, digo, como si la escena estuviera subtitulada y mi monólogo interior fuera tan evidente como mi rubor...
...Encuentro por casualidad documentos de word. Me sorprende que no me acuerde de las muchas veces que he abordado la misma historia como si fuera la primera vez que empiezo a escribirla. Me sorprende ese mundo paralelo, que existe por sí mismo, sin necesidad de un libro o novela que lo sustente...
...Pienso eso cuando Buñuel habla de los sueños como un mundo paralelo que él adora visitar. Me termino de leer el libro en la sala de espera del fisioterapeuta. Pienso en cómo es posible que haya empezado a escribir tantas veces dos o tres historias que creía que nunca había empezado a escribir...




...No sabría decir en qué lugar estaban. Saco un bolígrafo, apuntalo una idea que llevo rumiando hace tiempo, más tarde haré el experimento, y buscaré documentos donde esté ya presente esa idea. Igual sólo tengo dos o tres cosas que decir, y un segundo después de haberlas dicho de forma satisfactoria callaré para siempre. "Miguel Ángel, a la sala 2". La voz lo interrumpe todo. Comienza la sesion de fisioterapia. Sin libro. Sentado con los electrodos puestos por donde me rompí y me duele miro los carteles con la musculatura del cuerpo humano. Falta el sexo del muñeco del dibujo. A veces oigo las conversaciones en las otras cabinas. A veces comparto unos minutos con otras personas, y hablamos. La enfermedad es como un paréntesis, una espera. A veces me asomo, y veo a otras personas que hacen rehabilitación con movimientos. A veces pasa ella y me mira: pienso que es joven y deliciosamente guapa. Camina y me sonríe. Entra y sale de las cabinas...





...Hoy me puso las manos en la espalda y sentí el mismo rubor que cuando era chico y una chica mayor y guapa, me comía a besos. Yo era "muy mono", y muchas chicas mayores me querían comer a besos. Yo me ruborizaba. Hoy me pasó. No eres mayor y guapa, sino mucho más joven que yo y guapa. Quién sabe cómo verás tú a un treintañero roto como yo. Subiste la pierna en el taburete donde yo estaba sentado, te daba la espalda, maleducadamente, y te inclinaste para hundir tus dedos en mis músculos doloridos. Me hacías daño y me ruborizaba. Me acariciabas durante unos cuantos minutos, largos, deliciosos, y me sentía desconcertado. Se me ocurrían historias. Pensaba en los vínculos momentáneos que se crean entre el paciente enfermo y quien tiene la capacidad de sanar. Pensaba en qué instante mi rubor me decía que ella no sólo me estaba sanando, sino que algo en sus huellas dactilares me estremecía. Qué pensarías tú de esa espalda que desanudabas y sanabas mientras yo me ruborizaba con los ojos cerrados. Por dos veces siento tu rodilla en mi costado. Tu mano se detiene, mis ojos se abren, me limpias la crema, con una pequeña caricia en el hombro me haces entender que ya ha terminado todo. Toda una historia táctil, sin verbo. Gracias, digo, hasta el lunes, dices. Sales. Te vas. Me visto en soledad. Salgo. Te encuentro en el pasillo y me sonríes. No notas que vuelvo a ruborizarme. Nunca entrarás en este blog. Nunca sabrás nada de esta historia no verbal, nunca sabrás que repetí al menos dos veces: don't stand so close to me, como si yo fuera Sting y tú... Quién sabe, tú, quién, qué...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 25 noviembre, 2011

P.D. Las imágenes están sacadas de aquí.
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sábado, 19 de noviembre de 2011

¡ES LA NARRATIVA,ESTÚPIDO!



…Este cuervo ingenuo, que va por el tercer café en un día lluvioso, está retirado de la circulación: pienso que la democracia no debería ser un decorado de cartón piedra, y que la clase política no sólo carece alarmantemente de talento, no sólo es intolerablemente mediocre, sino que además pienso que salvo contadas excepciones, la política institucional es una forma de vida más (el parlamento suele estar vacío y sólo se llena para votar, se mandan sms para que acudan, de pronto congreso parece invadido por ratas trajeadas que se sientan, votan y vuelven a irse), como las oposiciones, como meterse a bombero o a trabajar de contable en un banco, y aun diría más, pienso que la inmensa mayoría la usan en beneficio propio, de sus empresas, de su prestigio social, de su vida individual…
…Estar retirado de la circulación permite dos cosas: no ser cómplice de nada con mi voto, con lo cual, la dosis de pitorreo a la que estaría sometido se reduce al porcentaje de farsa que sólo me toca como ciudadano, y no también como votante. Votar es como ser el caddy de Jack el Destripador, darle los palos con los que asestar mejores golpes, afilarle los cuchillos. He dicho que permitía dos cosas, la segunda es que desde la barrera se pueden ver las cosas narrativamente, y puede reírse cuando Buster Keaton se cae de culo, o puede decir “El rey está desnudo”…





…La narración de la realidad es en política mucho más importante que la realidad misma. Y no va a ser la realidad la que barra al PSOE en estas elecciones (veo que todo el mundo está sorprendentemente instalado en ese autoconvencimiento) sino la narración de esa realidad…
…Si uno está fuera de la realidad, completamente desconectado de la sociedad y de la vida diaria, si es incapaz de tomarle el pulso al día a día, la narrativa se resiente. Quiero decir, pienso que para que un discurso narrativo sea verosímil, uno tiene que estar en el mundo, tiene que vivir, tiene que estar en los puntos neurálgicos (medios de locomoción, conversaciones del populacho, mercados, aglomeraciones donde haya dos o tres seres humanos verbalizando), y si no, la narración será un ejercicio de impostura. La consecuencia de estar fuera de la realidad es tomar decisiones erróneas desde el punto de vista narrativo, y tomar decisiones erróneas desde el punto de vista narrativo cuando uno quiere, se supone, incidir en la realidad, tiene consecuencias fatales sobre ese propósito. Tan súmamente fuera de la realidad estaban, que cuando tuvieron que elegir entre un discurso narrativo u otro (Carme Chacón o Rubalcaba), eligieron a este último. Yo y muchos abrimos los ojos como platos. Se están haciendo el harakiri ellos solos, pensé, pensamos,cuando se deshicieron sin contemplaciones de Chacón. La realidad está así: cinco millones de parados y una clase política que pone el culo ante eso tan ambiguo y feroz y que sacia las ansias ludópatas de unos tipos que se enriquecen apostando, que son los mercados. Bien, la realidad está muy chunga, está en nosotros que al menos el personaje protagonista de nuestra narración sea una mujer (elemento diferenciador), nacida en los 70 (ya está bien de dinosaurios), cuya imagen en el subconsciente de los cuervos ingenuos que tienen que votar es la de una mujer pasando revista con un bombo. Hasta yo me lo habría planteado. ¡Hasta yo, que me siento estafado! Pero no, eligen a un tipo cuyo subconsciente remite al último gobierno de Felipe González, a… Buf… Da hasta pereza enumerarlo…
…Imaginémonos que la pareja protagonista de Casablanca hubieran sido Pepe Isbert e Ingrid Bergman: si encima la hubiera dirigido Billy Wilder la película sería una de las grandes comedias de la historia del cine…




…Pues bien, imagino cómo habría sido, desde el punto de vista narrativo, un debate entre Rajoy y Chacón: los papeles de Don Más De Lo Mismo y el papel de Don Savia Nueva, por lo pronto, habrían estado cambiados. Sorprendentemente, el discurso narrativo de ambos estarían apelando al cambio, estaría disputándose en el terreno de la ilusión, del futuro, de la indignación. ¿Nos damos cuenta de la pobreza del discurso narrativo de este país, cuando el papel de Don Savia Nueva está interpretado por Rajoy? ¿Nos damos cuenta de que no podemos esperar una puta mierda de la realidad cuando Rajoy es la novedad del discurso narrativo? El PSOE estaba tan fuera de la realidad, tan desconectado, tan sordo, que no sólo se contentó con elegir al protagonista equivocado, sino que rizó el rizo y basó su narración de la realidad en ese pobre protagonista: es decir, eligió a Pepe Isbert para protagonizar Casablanca y además los guionistas le hicieron llevar el peso de la película. Eso sólo tiene un nombre: fra-ca-so-a-nun-cia-do: el aire de fin de fiesta de los anuncios del PSOE, la música clásica, esa señora que parece leer en un sofá después de que sus invitados se han ido y se apilan las copas y los platos en el lavavajillas, ese pelear por lo que uno quiere, esas carreras de velocidad del candidato, ese tenemos en quién confiar… Está feo que lo diga yo, que soy un Cuervo Ingenuo, y que no tengo ni idea de semiótica, imagino que han contratado a publicistas expertos en los discursos narrativos, pero el discurso narrativo es éste: apoyadme, que estoy peleando por lo que quiero, que estoy corriendo para conseguir lo que quiero, que a pesar de esta cara que tengo y de la realidad a la que yo he contribuido (cinco millones de parados, sensación térmica de desesperación, de pesimismo, etc) tienes, votante, que confiar en mí. El discurso narrativo es la fé. Por contra, el discurso narrativo del PP es simple: vamos a poner en el ojo del huracán la sensación térmica y a partir de ahí vamos a hablar de entrar en una dinámica de cambio. Como, si ellos tienen a Pepe Isbert, nosotros tenemos a Luis Cigues, vamos a desdibujar al candidato, a quitarle peso, Luis Cigues, llegado el momento, gestionará esas ganas de salir de ésta. Y el resultado es un discurso narrativo donde el candidato apenas aparece, y donde aparecen ciudadanos diciendo lo que quieren…
…Yo, Cuervo Ingenuo retirado de la circulación, como la falsa moneda, no digo más: que cada palo aguante su vela, pero, al contrario de lo que pensamos, no es la realidad la que dará sentido al voto: ¡es la narrativa, estúpido!...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 19 noviembre, 2011

P.D. La última foto está tomada de aquí
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domingo, 13 de noviembre de 2011

E TI VENGO A CERCARE




...S. me recomienda un fisioterapeuta y me cuenta una entrevista que le hicieron el otro día. Hablamos de incendios invisibles. Me sumerjo en sus ojos y me acuerdo de Léolo, cuando encuentra el tesoro al fondo de la piscina el día que casi muere ahogado. Apuro la cerveza. Tus ojos me recuerdan a una piscina, pienso, una de esas piscinas verdosas en un patio al final de la tarde, cálida por los rayos de sol de todo el día, pienso. ¿qué hacemos ahora?, digo, ¿nos tomamos otra?, digo. Sí, dices, tus ojos piscina me miran...




...Mientras te esperaba he entrado en Beta: antes era un teatro. Los libros de cine, teatro y música están en lo que antes era el escenario. Encuentro por casualidad Mi último suspiro de Luis Buñuel. Vuelvo en el autobús. Demasiado para mi espalda. Puedo elegir dos asientos: al lado de la chica joven me molestará el sonido de su i-pod; al lado de la vieja gallina quizás pueda leer el libro que leen sus ojos cansados y ojerosos. Me siento. Saco a Buñuel, empiezo a leer. Miro de reojo lo que lee la vieja gallina, sostiene un marcador de páginas de una virgen. De todas formas me sigue molestando el i-pod de la joven. La mano de Fátima. Bah. La chica joven es guapa, huele a chicle. Saciada mi curiosidad por el libro que lee la vieja gallina me cambiaría de asiento. Leería las memorias de Buñuel junto a una chica joven que huele a chicle y escucha su i-pod. Pero un tipo ya ha ocupado el asiento libre...




...El libro empieza así:

"Yo no soy hombre de pluma. Tras largas conversaciones, Jean-Claude Carrière, fiel a cuanto yo le conté, me ayudó a escribir este libro"...

...Buñuel me hipnotiza. Él mismo sostiene que era un buen hipnotizador, y que el cine es, en cierto modo, una forma de hipnosis. No puedo parar de leerlo. Lo leo en la cama, en la sala de espera del centro de fisioterapia: me río cuando habla del alcohol o cuando cuenta anécdotas o cuando esboza personajes: "También veía a Cossío, bajito, cojo y tuerto, que miraba con cierta amargura a los hombres robustos y sanos"...


...No recordaba el título de la canción de Battiato. La he buscado por todas partes. El caimán llega al Quirinale para presentar la dimisión a Napolitano. Una horda grita "buffone" y "ladro", y cantan "Bella Ciao" y el "Aleluya" de Haendel. Me parece bien que termine así ese ser nocivo, lo celebro, pero me hacen gracia las hordas. Parece que estaba ahí por arte de magia. Ahora resulta que nadie lo había elegido. Pienso qué haría Buñuel con la historia de este miserable tiparraco, o Valle-Inclán. Hasta ahora todas las sátiras han sido inofensivas, no estaban a la altura de lo siniestro del personaje. Siempre pasa igual con los animales domésticos...




Miguel Ángel Maya
Sevilla, 13 noviembre, 2011
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miércoles, 9 de noviembre de 2011




...Hago el saque de honor mordiéndome el labio. El mundo gira en torno a mis cervicales y mi espalda y el dolor. Dos candidatos, Gargamel y Fofó, me toman el pelo a base de sandeces y mentiras y retórica de parvulario. Cuelgo en mi facebook una foto que dice Franz Kafka for president. Es una manera inofensiva y dócil de romper la baraja, una protesta domesticada, dentro de los cauces, soy un buen chico. Es como si me tumbara en el estudio de grabación a escuchar lo que acabo de grabar mientras bebo una cerveza y mis dedos recuerdan los acordes, sólo que de los altavoces no salen caballos salvajes ni tranvías llamados deseo. Sólo salen insignificantes temas de bolero, avidez de fotogramas, acidez de estómago, latido y alma, cielo agrio robertoarltiano. Y la música que queda... para camaleones, para cigarras perezosas, para hormigas laboriosas, para solitarios y omnívoros jugadores de póker con lágrimas de cocodrilo...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 9 noviembre, 2011
*

viernes, 4 de noviembre de 2011

NOVEMBER



No shadow no stars
no moon no cars
November
it only believes
in a pile of dead leaves
and a moon
that's the color of bone

Tom Waits





...Veo la bota de oro en un programa deportivo y pienso en los buscadores de oro, en las pepitas de oro en los ríos de las selvas, en Chaplin en blanco y negro y mudo y en una cabaña a punto de caer por un precipicio nevado...




...Llueve. Tomo las medicinas para la espalda. Suena Tom Waits. Suena Goyeneche. Noviembre, Tom Waits y Goyeneche son un clásico. Suena música de cine. Los documentos del voto por correo, los capítulos de los libros de Saint-Exupéry que estoy traduciendo. Ya están los dos candidatos colgados en las farolas. Dan náusea. Dan asco. El otro día, en el telediario, hablaban de un debate a dos, y hablaban de las corbatas de los candidatos. Con la que está cayendo, y hablaban de corbatas...




...Mi móvil suena mucho. Son chicas jóvenes que me llaman en nombre de mi seguro o del otro seguro. Me preguntan cómo me encuentro. Son amables. Son perras guardianas. Les cuento mi dolor, me hace gracia contarle mi dolor de espalda y cuello a una desconocida que calcula indemnizaciones según mi relato del dolor. Miro la lluvia mientras les cuento mi dolor. Me piden informes que acrediten mi relato. Me enternezco cuando dicen "esperamos que te mejores". Me doy cuenta de la soledad cuando me enternece una frase corporativa...





...Pienso en Georges Brassens y en Saturne, cuando dice Cette saison, c'est toi, ma belle qui a fait les frais de son jeu, toi qui a dû payer la gabelle un grain de sel dans tes cheveux, pienso en mi fecha de nacimiento, pienso en el último noviembre de los años ochenta. Llueve. Me tumbo. El dolor es una topografía curiosa, me digo. La felicidad se llama Messi, me digo. Todo es mentira, me digo antes de desaparecer...




...Busco ropa en los armarios. Intento acompasar mis teclas al ritmo del goteo de la lluvia desde un aparato de aire acondicionado de arriba que cae exactamente en una uralita metálica al lado de mi balcón. Terre des hommes: Saint-Exupéry copiaba y pegaba. Sus textos se repiten en sus libros. Crió gacelas en Cap Juby y en al menos tres libros. Estaba enamorado de una mujer a la que dedicó un manuscrito. Ella lo vendió...




...Vino. Estanterías llenas de libros. Pantallas repletas de cine. Sólo eso basta para salvarse. Me tumbo, maldito cuello, maldito azar, maldita espalda, digo. Pienso en Los ingrávidos de Valeria Luiselli, y pienso en los fantasmas incorpóreos, los libros entre las manos, todos los libros, todas las películas, y el fuego azul que lleva al café, y la soledad ingrávida, y los derrumbes, los que no tienen cuerpo no sufren el dolor, los desalmados tampoco...





...Me acuerdo de las hojas muertas, de Billie Holiday, de Miles Davis, de Coltrane. Suenan a la vez y forman escándalo. Me río. Me hace gracia escuchar varias canciones a la vez, aunque sean la misma canción, me hacen gracia los candidatos colgados en las farolas, los dos son unos hijos de puta. Me doy cuenta de lo triste que soy. Pongo un punto y final a todo. Apuesto todo o nada a Billy Wilder. La noche me espera viendo a Marilyn beber de una petaca. Ni siquiera esos dos mamarrachos disfrazados de mujer evitan el llanto...
...No paro de reír, pero no evitan el llanto...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 4 noviembre, 2011

P.D. Las fotos están tomadas de aquí.
*Enlace

martes, 1 de noviembre de 2011

PIZARNIK ANIMAL



Nunca de nuevo la esperanza
en un ir y venir
de nombres, de figuras.
Alguien soñó muy mal,
alguien consumió por error
las distancias olvidadas.

Alejandra Pizarnik




Alguien mide sollozando
la extensión del alba.
Alguien apuñala la almohada
en busca de su imposible
lugar de reposo.

Alejandra Pizarnik




...Y sí, la ludopatía bursátil de los mercados, y la ruleta rusa, y las mafias o los monstruos, no entienden nada de lo que significa olisquearse, desplegar la orfandad sobre la mesa como un mapa, dibujar un itinerario, fallecer, cortarse con la copa del Martini que previamente cometió el crimen. Nada saben de los licores furiosos, de las noches en vela, de los colchones, de los vasos vacíos, del repetido gesto de hacer deslizar una ropa interior por una topografía, and a rose is a rose is a rose...




...Nada, ni rastro de la página 107 de un libro previamente robado en Buenos Aires que cae de la estantería, que llama la atención, que vibra, y te pide que lo abras por la página por donde se rompe, se despliega y se rompe (ya se rompía en la librería de Buenos Aires, ya se dobló cuando me apresuré a metérmelo en el bolsillo interior de una chaqueta que ahora yace) y es como si Pizarnik abriera sus piernas tocándose y mojándose: una presencia para tu sed, probablemente partirá esta ausencia que te bebe. Y leer eso a las 3 de la madrugada cuando vuelven a ser las 2 de la madrugada, y recuerdo con todas mis vidas por qué olvido...




...La ludopatía bursátil no sabe nada de las instrucciones para devorarse, de Henry Miller babeando frente a una falda de vuelo de flores, subiendo a su cuarto a escribir, pensando en toda una primavera llegando a su fin, en todo un noviembre que se aproxima en un doble estallido de bestias que sollozan, no sabe nada del cielo nublado, de este manantial de lobos, este dolor de espalda, este mareo cervical, esta botella de vino apresurada, esta Pizarnik Animal, este grotesco opio del pueblo...





Miguel Ángel Maya
Sevilla, 1 noviembre, 2011
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P.D. Esta entrada contiene camuflados versos de Alejandra Pizarnik (y no están en cursiva).
P.D. II La primera y la tercera foto están sacadas de aquí.
P.D. III El resto de las fotos, menos la de Scarlett Johanson, están sacadas de aquí.
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jueves, 27 de octubre de 2011

PERO NO SÉ QUÉ




Simoncelli se agarra a su moto. Siente que es lo que tiene que hacer. Ha resbalado y se agarra a su moto. Ese gesto involuntario vuelve a meterlo en la pista y otros dos pilotos se lo llevan por delante. Muere. Ahora es fácil decir ¿por qué te agarraste a la moto? ¿por qué no te saliste de la pista? Parece mentira, es como si fuera fácil volver a repetir la escena: venga, esta no ha valido, ahora me vuelvo a caer y me salgo de la pista y queda todo en unas cuantas contusiones. No vale que muero…




…El semáforo se pone en ámbar. No, no va a darme tiempo, me digo. Freno. Se pone en rojo. Freno más. Me detengo frente al semáforo. Podía haber pasado, me digo, en rojo, pero es mejor así. Oigo un frenazo en alguna parte, lejos, que se acerca. Miro por el retrovisor. Un coche se acerca a mucha velocidad. Está frenando pero sé que no va a darle tiempo. Todo es lento. Lo veo todo como si ya hubiera pasado pero cierro los ojos y espero un golpe, durante un lapso de tiempo espero un golpe seco desde un limbo lento, desde una agitación extraña. Espero. Suena el golpe seco. Mis ojos cerrados. Mi cuerpo impulsado por una inercia incontrolable. No entiendo por qué he cerrado los ojos. Mi coche avanza varios metros. Es una percepción extraña. Ya ha pasado todo. Me duele el cuello y la espalda, pero todo ha pasado ya. Siento ganas de llorar, las manos me tiemblan. El semáforo se pone en verde pero los coches observan. Si hubiera pasado con el semáforo en rojo aun por unas décimas de segundo, esto no habría sucedido. Esto lo sé ahora. Si esto fuera uno de esos libros de Elige tu propia aventura sabría qué habría sido de mí si me hubiera saltado el semáforo entre el ámbar y el Salgo del coche. Siento un ligero mareo. Veo un coche destrozado y una chica en estado de shock, llora, la boca abierta. Un chico me pregunta si estoy bien. No lo sé, digo. Miro mi coche. Miro el otro coche. Todavía no entiendo nada. La chica dentro del coche llora. La parte delantera de su coche está destrozada. El chico me pide que me quite las gafas para mirar mis pupilas, me pregunta si siento zumbido en los oídos, náuseas, cosquilleo en las manos. No lo sé. Todavía no sé qué ha pasado. El mundo sigue andando, nuestros coches detenidos, heridos, ahí. La chica llora. Yo tiemblo. No lloro. Aturdido relleno un papel, burocracia. Pienso en lo que podía haber hecho para evitarlo. Tranquilizo a la chica. El chico escribe por mí sobre mi coche. Me pregunta mis datos, yo respondo. Todo va volviendo a su cauce. Al irme la chica me da su tarjeta: es profesora de yoga. Me la guardo en el bolsillo trasero, junto a un billete de tren y un papelito naranja que me dio en París la bailarina rota. No sabía que todavía estaba en el bolsillo. El pantalón de invierno, de París y de romperse, me digo…
…Podía haber pasado el semáforo en rojo, me digo todavía cuando cierro los ojos y recuerdo el golpe, o haberme bajado, o haber acelerado. Podía haber no pasado, pero en las manos de quién de nosotros estaba que no sucediera. ¿Por qué, Simoncelli, te agarraste a tu moto? Estoy vivo, me digo, siento gratitud por algo, pero ¿por qué no hiciste cualquier otra cosa para evitar que el azar zarandeara tus vértebras?, me digo…
…Algo ha pasado, pero todavía no sé qué...

Miguel Ángel Maya
Sevilla, 27 octubre, 2011
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